El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria está ultimando los pasos para formalizar con la empresa adjudicataria el nuevo contrato del Servicio de Ayuda a Domicilio (SAD), una prestación que contará con un presupuesto de 31 millones de euros para los próximos tres años con el objetivo de mejorar la calidad de vida de más de 3.300 personas mayores y dependientes del municipio.
La Junta de Gobierno ha aprobado hoy la disposición de los 3.451.337 euros que destinará para el ejercicio de 2020 la Concejalía de Servicios Sociales al nuevo pliego, en el que se invertirán 27.610.702 euros los años 2021, 2022 y 2023.
La concejala de Servicios Sociales, Carmen Luz Vargas, destaca que "damos un paso más para fortalecer una de las grandes apuestas sociales de este Ayuntamiento, con una inversión que nos permite reforzar el servicio y dotarlo de más recursos para seguir facilitándole la vida a miles de vecinos y vecinas que carecen de autonomía personal y a sus familias".
El nuevo contrato, que se divide en tres lotes que agrupan a todos los barrios y distritos de la ciudad, ha sido adjudicado a la empresa Servisar S.L y tendrá un plazo máximo de vigencia de tres años, si bien se podrá prorrogar por un año más.
Carmen Luz Vargas señala que el nuevo contrato supondrá la mejora de este servicio esencial a través de un incremento de horas y de una atención diaria aún más personalizada a personas que requieren de apoyo de carácter doméstico, como higiene o alimentación, o de apoyo rehabilitador en caso de personas dependientes.
En este sentido, señala la edil, "el objetivo de este recurso municipal es prevenir o compensar su pérdida de autonomía y facilitar su permanencia en el entorno doméstico en las mejores condiciones, así como proporcionar apoyo a su familia o las personas que se encargan de sus cuidados".
El Servicio municipal de Ayuda a Domicilio promueve la autonomía personal de los usuarios en su propio domicilio, siendo gran parte de ellos mayores de 60 años, con apoyo en servicios básicos como el mantenimiento de la higiene personal, la limpieza doméstica, la alimentación y otras tareas domésticas.
Asimismo, para facilitar el bienestar emocional de los usuarios, el Ayuntamiento busca con esta prestación favorecer el acompañamiento de estas personas, ya que muchas viven solas, así como ofrecer atención psicológica individual.
A través del incremento presupuestario, el nuevo contrato permitirá dar atender a los usuarios según sus perfiles. Además, se implantarán sistemas digitales para optimizar el servicio.
