Es lógico sentir impotencia, pero realmente, desde nuestra casa, ¿es cierto que no podemos hacer nada?
Desde mi humilde punto de vista creo que sí.
Ya en mi artículo publicado en este mismo medio el 1 de enero de este año, hablaba de la importancia de la independencia energética como un de las motivaciones que debemos tener a la hora de mejorar nuestra eficiencia energética, y por tanto nuestro consumo energético.
Actualmente vemos cómo el as que podríamos tener en la manga se desvanece debido a nuestra dependencia energética de Rusia, que a nivel europeo supone el 40% de nuestro consumo de gas. Pretendemos activar sanciones económico-financieras, pero le seguimos comprando gas y petróleo. Les expulsamos del sistema SWIFT, pero no a todos los bancos porque entonces no podríamos pagarle el gas y petróleo que le compramos.
Tal y como yo lo veo es el momento de que Europa empiece a autoracionarse su consumo energético, de tal forma que podamos conseguir reducir el porcentaje de dependencia de Rusia.
¿Significa eso que debemos frenar nuestra economía para poder rebajar la demanda energética?
Evidentemente, no, pero sí es el momento de revisar todos nuestros consumos, de acelerar la tramitación de todos aquellos proyectos de renovables que estén disponibles y ejecutar de forma urgente todas las mejoras de eficiencia energética.
Si usted es alguien que se estaba planteando si instalar o no paneles solares (térmicos, fotovoltaicos o ambos) en su casa o cambiar las luminarias a led, es el momento.
Si usted es propietario o gerente de una empresa (pública o privada), quizás sea el momento de revisar la gestión energética de su empresa con un profesional, para eliminar todas aquellas fugas de energía innecesarias, además de intentar concienciar a sus empleados.
Si usted tiene alguna responsabilidad política es el momento de acelerar, promover, ayudas para la mejora de la eficiencia energética, de la propia administración pública en primer lugar y de empresas y particulares.
¿Por qué debemos molestarnos en autoracionarnos la energía?
Creo que es evidente que ante esta disyuntiva podemos dar un paso al frente o quedarnos como estamos, pero creo que es interesante también analizar las consecuencias de no hacer nada.
A nivel particular veremos cómo en breve los precios de absolutamente todo comenzarán a subir, puesto que todos los procesos industriales (fabricación, distribución y comercialización) llevan un gasto energético.
A nivel empresarial, observaremos como necesitaremos subir los precios de los bienes y servicios que vendemos para poder compensar los costes energéticos y de materias primas, lo que hará que dichos bienes y servicios sean menos accesibles para los clientes y disminuyan las ventas.
A nivel gubernamental, experimentaremos una nueva crisis con nuevos despidos o ERTES debido al incremento de costos y disminución de ventas de las empresas, que volverán a incrementar el gasto social y retrasar la recuperación económica.
Toda aquella inversión dirigida al fomento del ahorro energético y el consumo de bienes y servicios locales, disminuirá la inversión en medidas paliativas para evitar la caída de la economía.
Por otro lado, debemos tener en cuenta que todas aquellas medidas que vayan destinadas a reducir la demanda de gas o petróleo procedente de Rusia es una medida que en la práctica está acortando la duración de la guerra, ya que ocasiona problemas para financiarla.
A continuación enumero una serie de aspectos que deberíamos revisar, cada uno dentro de sus posibilidades y dentro de su ámbito de actuación:
Particulares:
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¿Podemos instalar energía solar fotovoltaica (a ser posible con baterías)?
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¿Podemos instalar energía solar térmica?
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¿Hemos revisado la iluminación?
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¿Podemos planificar mejor nuestros desplazamientos para intentar ahorrar gasolina?
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¿Es viable utilizar el transporte público?
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¿Tenemos la posibilidad de disponer de un vehículo eléctrico?
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Etc…
Empresas (públicas o privadas):
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¿Tenemos cubierta disponible para instalar energía solar fotovoltaica?
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¿Es viable que los vehículos de empresa sean eléctricos?
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¿Hemos revisado que la iluminación de la empresa sea eficiente?
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¿Podemos prescindir de iluminación ornamental o reducir su horario?
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¿Es posible ajustar la temperatura del aire acondicionado y/o calefacción? Tampoco necesitamos ir a trabajar en camiseta en invierno ni con abrigo en verano.
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¿Es posible mejorar la concienciación de los trabajadores?
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Etc…
Administraciones:
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¿Es posible acelerar los proyectos de iluminación vial led?
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¿Es posible que todos los edificios públicos dispongan de energía solar fotovoltaica?
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¿Es posible valorar qué coches oficiales pueden ser eléctricos?
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¿Es posible mejorar la gestión de la climatización en los edificios oficiales?
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¿Tienen todos los edificios oficiales una iluminación eficiente?
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¿Es posible que todos los terminales informáticos estén apagados fuera del horario laboral? (También para mejorar la seguridad de la red).
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Etc…
Miguel Llinas
Ingeniero Técnico, Especialista en Gestión y Ahorro Energético